
La AMD Radeon VII fue presentada durante el pasado CES 2019 y ha sido toda una apuesta por parte de la compañía.
La Radeon VII forma parte de la segunda generación de tarjetas gráficas basadas en Vega siendo también la primera GPU de AMD en estar fabricada en 7nm. Este modelo viene directamente a competir con la actual RTX 2080 de NVIDIA.
A pesar de los grandes esfuerzos de la compañía en ofrecer una opción de alta gama y crear de nuevo competencia en el mercado, parece no haberle salido muy bien la apuesta a AMD sino todo lo contrario, y es que su precio de lanzamiento de 699$, cerca de los 750€ podría rondar en el mercado nacional, es bastante elevado.
Este precio se debe en gran parte a la desproporcionada cantidad de memoria VRAM con la que cuenta, 16GB de memoria HBM2 muy poco aprovechables. Y si, su precio repercute en esto debido a que tan solo la memoria costaría 320$, cerca de los 300€ al cambio, ya que actualmente cada chip HBM2 de 4GB cuesta 80$.
Parece ser que esta decisión por parte de AMD fue más por parte del equipo de ingeniería que de marketing debido a que estamos ante una Radedon Instinct MI50, una tarjeta grafica pensada para el sector profesional, adaptada al segmento comercial donde AMD no quiso apartar un equipo de ingenieros para crear una versión de 8GB que si bien, esta seria mas barata y apropiada al mercado general.